progressif

lunes, julio 30, 2007

Dos caras de la derecha PRIANista





Tomados de La Jornada, Hernández y Rocha y El Universal, Helioflores y Naranjo.

Los fraudes en contra de la paraestatal mexicana Pemex fueron cosa rutinaria con el PRI y desde hace seis años lo son con el PAN. Las pruebas son tales que hasta el pelele Felipe Calderón Hinojosa ha echado mano de ellos para tratar de aplacar al yunquismo que controla a su partido.

Se habla de mil 700 millones de pesos que fueron defraudados a la paraestatal para engrosar las arcas del gansteril sindicato petrolero, controlado por el caique sindical Carlos Romero Deschapms –impuesto por el corrupto Carlos Salinas de Gortari-, mismo que fue acusado –y luego “perdonado” por el PRIANismo- de desviar mil 500 millones de pesos del sindicato para la campaña presidencial del año 2000 de Francisco Labastida Ochoa del PRI. Impunidad pura con la que el PAN presionó al PRI gran parte del sexenio del ladrón y traidor Vicente Fox Quesada.

El usurpador Calderón Hinojosa se negó hoy a fijar una posición frente a este escándalo que el mismo dio la instrucción de destapar y afirmó: “No quiero hacer ninguna caracterización ni enjuiciamiento previo, no me compete hacerlo. Se trata de un caso en el que, como muchos otros, la Secretaría de la Función Pública está haciendo su tarea, su responsabilidad y en todo caso serán las autoridades correspondientes las que resuelvan”, indicó. Se trata pues de otra de sus mentiras, la secretaría citada responde directamente a él pues forma parte de su “gabinete” pirata.

En cambio si se entromete en cuestiones ajenas a él. La deuda, el agua y todo lo relacionado con la administración del Distrito Federal compete a los ciudadanos del esa entidad y a la administración local. Son varias semanas en que el espurio a presionado a el gobierno local con la foto oficial –como ya lo han hecho los de nueva derecha, la corriente de los “chuchos” en el PRD-, al cuestionar fallas en los sistemas de prevención de desastres. Sin embargo, no se aprueba la reestructuración de la deuda, ni el dinero para los damnificados. Y aquí vale la pena aclarar algo. El dinero del Fondo Nacional de Desastres (Fonden) es dinero de impuestos de todo el país, no es del pelele. El PRIAN por decada ha negado a los habitantes de la ciudad de México los derechos que les corresponden en la Constitución, pues como ha quedado claro a lo largo de 10 años la mayoría de sus habitante no votan por esas derechas.

Así que los utilizan como rehenes a la hora delas negociaciones en los “oscurito”. Se trata de actos mafiosos del calibre de los que acostumbran Televisa, Radio Centro, TV Azteca, Manlio Fabio Beltrones, Elba Esther Gordillo, Carlos Salinas de Gortari, Vicente Fox Quesada, Santiago Creel, Emilio Gamboa Patrón, Diego Fernández de Cevallos, Manuel Espino, etc. Esos mismos que se desagarran las vestiduras proclamando “respeto a las leyes y las libertades consagradas en la Constitución”. De ese tamaño es el cinismo y la corrupción en México.


La siguiente nota fue tomada de la revista Proceso.







Muestra Calderón desdén por los derechos humanos: AI



leonardo boix


Londres, 30 de julio (apro).- El gobierno de Felipe Calderón “no tiene como prioridad avanzar en el tema de los derechos humanos”, dice Robert Knox, investigador sobre México de la organización Amnistía Internacional (AI).

“No hemos visto ninguna señal clara y evidente de que este gobierno (de Calderón) tenga la determinación de resolver los problemas sobre derechos humanos”, afirma.

Y añade que para el nuevo gobierno mexicano, Oaxaca es “una prueba de fuego”, pues desde 2006, “las autoridades federales y el gobierno estatal han dejado en la impunidad homicidios, torturas, detenciones y cateos arbitrarios, así como una serie de violaciones individuales y colectivas ocurridas a lo largo del conflicto” en ese estado.

Insiste: “Hay que reconocer que estamos hablando de un gobierno (el de Calderón) que no ha cumplido siquiera un año en el poder, pero aun así podemos ver su falta de políticas en materia de derechos humanos”.

Comenta que ésta es una de las muchas preguntas que AI planteará al gobierno mexicano.

Y es que, a partir del próximo 31 de julio, una delegación de alto nivel de AI –encabezada por su secretaria general Irene Khan-- realizará una visita de cinco días a México para evaluar la situación de los derechos humanos en éste país y emitir un informe al respecto.

“No dudaremos en denunciar las violaciones cometidas”, advierte Knox, quien será uno de los miembros de dicha delegación.

Entrevistado por Apro minutos antes de viajar a México, Knox dice que dicho informe incluirá el caso de Oaxaca. Afirma que en él “vamos a decir que no hay únicamente una cuestión de responsabilidad estatal, pues las autoridades federales han sido señaladas como involucradas en violaciones de derechos humanos desde finales de octubre pasado y, a partir de lo que nosotros hemos podido documentar, no ha habido investigaciones adecuadas para esclarecer los hechos y juzgar a los responsables”.

Durante su visita a México, la delegación de AI tiene planeado reunirse con sobrevivientes de abusos de derechos humanos, organizaciones civiles, legisladores, ministros de la Suprema Corte de Justicia y autoridades federales y estatales, como la canciller Patricia Espinosa; el secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, y el gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz.

Josefina Salomón, encargada de asuntos de prensa de AI informó a Apro que la delegación solicitó una reunión con el presidente Calderón, la cual no ha tenido respuesta. “Realmente queremos sentarnos con el gobierno federal para expresarle nuestras preocupaciones, que son tan grandes como cuando estaba (Vicente) Fox en el poder”, declaró.

Y señaló que, en caso de que no sean concedidas las solicitudes para reunirse tanto con las autoridades federales como estatales, “lo veremos como una señal negativa, de que no les interesa el tema de los derechos humanos”.

De hecho, la visita iniciará en Oaxaca para “recabar información sobre los más recientes acontecimientos de exceso de violencia” del pasado 16 de julio, señaló Knox. Después, la delegación viajará a la ciudad de México y al estado de Guerrero.

Entrevistada por Apro, Salomón adelanta que, durante las reuniones con las autoridades, los miembros de AI abordarán el tema de “los abusos que se han cometido. Les pediremos que se juzguen a los responsables y que se tomen medidas para evitar que hayan más víctimas”.

Oaxaca, el objetivo

Knox, por su parte, dice que la estancia en Oaxaca de AI les permitirá “constatar casos emblemáticos” de abusos a los derechos humanos, los cuales quedarán documentados en el informe que emita posteriormente ésta organización. “También hablaremos con las autoridades locales e intentaremos que no haya impunidad en esos casos, lo que actualmente existe. Ese va a ser el objetivo principal en Oaxaca”.

Knox dice que la situación en éste estado “es compleja”, pero aclaró que “sigue siendo responsabilidad fundamental del Estado y de las autoridades federales, estatales y municipales”, garantizar el bienestar de los ciudadanos, “y hasta el momento no hemos podido constatar la determinación para llevar a cabo ese objetivo”.

Añade: “Oaxaca es un tema puntual y actual de violaciones muy graves que ocurrieron, que están ocurriendo y han vuelto a ocurrir”.

Y subraya que sigue siendo “una prueba muy dura” para las autoridades “que asumieron la responsabilidad de no dejar de investigar”.

Señala que el gobierno de Calderón “puede modificar su actitud y hacer lo que no ha ocurrido durante muchos años: resolver los problemas sobre derechos humanos. Tiene toda facultad y, si quisiera, toda la capacidad para atender esos casos de abusos”.

Knox agrega que la delegación de AI planteará al gobernador Ulises Ruiz “que se asuman las responsabilidades sobre el respeto a los derechos humanos”.

Explica: “Aunque existen agentes municipales y estatales, la responsabilidad recae directamente en el Ejecutivo del estado. Primero, para prevenir y, segundo, para investigar y esclarecer las acciones y las responsabilidades. No hemos visto esas acciones y los últimos acontecimientos de la semana pasada muestran que hubo un uso excesivo y desproporcionado de la fuerza por parte de las fuerzas policiales”, señala Knox en referencia a los hechos del pasado 19 de julio, cuando profesores y miembros de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) se enfrentaron con los policías estatales, lo que dejó un saldo de al menos 19 heridos y 40 personas detenidas.

“Esto demuestra otra vez que la impunidad que ha existido en los últimos años seguirá contribuyendo a que se cometan más violaciones. Hasta que no exista la determinación de acabar con una policía que utiliza la fuerza excesiva para controlar manifestaciones y para enfrentar cualquier movilización o movimiento social, habrá más violaciones de derechos humanos”, afirma el investigador de AI.

En ese sentido, señala que se requiere ese “cambio fundamental” y que “la única forma de garantizarlo es a partir de que las personas responsables (de abusos) sean investigadas y enjuiciadas por la Justicia.

“Esos serán los mensajes que llevaremos al gobierno de Oaxaca encabezado por Ulises Ruiz. Obviamente no tomaremos ninguna posición sobre las elecciones que va a haber próximamente, pero es una cuestión de investigar los hechos”, subraya.

Reitera que AI “reconoce y siempre ha reconocido”, que la situación de seguridad pública en Oaxaca “es muy compleja” y que “no ha sido un trabajo fácil”. Pero, advierte, “es justamente la obligación del Estado” ofrecer esas garantías “y no se puede suponer que un grupo de manifestantes esté actuando de forma ilegal, sin pruebas, cuando el Estado tiene la obligación de actuar dentro del marco de la ley”.

“En el informe que presentaremos eso lo vamos a tratar”, adelanta.

Calderón, como Fox

Durante la entrevista, Knox admite que, durante el gobierno de Vicente Fox, “hubo avances importantes en temas de apertura, del escrutinio internacional y de los compromisos con los organismos internacionales de derechos humanos”.

“Pero –advierte-- eso no se tradujo en cambios substanciales o estructurales a nivel del país. Lo que hemos visto actualmente es una falta de prioridad de este gobierno en avanzar en temas de derechos humanos. No hemos visto ninguna señal clara o evidente de que haya determinación de este gobierno para resolver los asuntos de derechos humanos”.

Añade: “Ojalá que, con esta visita de Amnistía, se concrete esa agenda y esa determinación y voluntad política para realmente atender los problemas existentes, que son muchos”.

Al preguntarle qué espera lograr AI con su visita de alto rango y con la publicación de su informe, Knox asegura: “Nosotros esperamos que nuestro informe cambie cosas en este gobierno y en el país (…) Porque creemos que es importante lo que hacemos, vamos a México para tratar temas como cuál debe ser la actitud y las acciones del gobierno federal --que aunque no ha tenido una responsabilidad directa de todo-- tiene un liderazgo que es imprescindible para demostrar a los otros niveles del Estado que no se pueden tolerar las violaciones a los derechos humanos”.

Por último, pide a Calderón “que tome en cuenta” la agenda que tratará de impulsar Amnistía Internacional “y actúe sobre esas recomendaciones que nosotros le vamos a hacer, porque ese es el primer paso para integrar los derechos humanos en las políticas de Estado”.