La defensa de los refrescos ¿A quién protegen?

Tomado de La Jornada, El Fisgón.


Los senadores aprobaron en lo general la Ley de Ingresos, pero dejaron en reserva para su discusión el gravamen de 5 por ciento a refrescos. Dicen los del PRI, PRD y Convergencia que se afectará a las clases populares. Es cierto, pero lo es también que el refresco no es ni con mucho un alimento o un artículo de primera necesidad, es a lo más un generador de energía. Pero ésta puede obtenerse también del azúcar directamente sin tener que tomar refresco, más saludable y claro que más barata. Así que no queda claro a quien defienden, es demagogia o se trata de no interferir con los poderosos intereses de los refresqueros.

Se acaba el año y el usurpador sigue repartiendo puestos ahora tocó el turno al administrador de aduanas –recordemos que en el sexenio del traidor y ladrón de Fox esta fue una de las cajas chicas de la insaciable Marta Sahagún y de los bribones Bibriesca- luego de que rechazaran su primera opción (Luis Roberto Patrón) por tener ligas con la familia propietaria de Coppel. El elegido es Juan José Bravo Moisés, quien deberá ser ratificado por el Senado.

En lo que es otro capítulo más de la desfachatez del asesino de Oaxaca Ulises Ruiz Ortiz, hoy miércoles fueron trasladados 91 presos del penal federal de San Francisco del Rincón, Nayarit a los penales de Tlacolula y Miauhuatlán en el estado de Oaxaca. El mismo que hizo que los llevaran lejos del estado ahora intercede para que sean trasladados para que sus familiares puedan verlos. La maniobra es burda y deja ver el anquilosamiento del PRI, son tácticas rancias y sin efecto en una población que ve más adelante que los dinos priístas.

Y como muestra están las declaraciones del equipo jurídico del Comité 25 de noviembre – que es encabezado por Francisco Toledo- quien responsabilizó a Ulises Ruiz, y al secretario de seguridad pública federal, Genaro García Luna, de la integridad física de las 91 personas pues no fueron avisados ni los defensores ni los familiares de la maniobra, por ello solicitó a la Comisión Nacional de Derechos Humanos que envíe personal a los penales de Tlacolula y Miuauhuatlán para verificar el estado de los detenidos. ¿Y la ley? Creen que pueden disponer de las personas a su arbitrio, pero lo que hacen es ilegal.

El siguiente artículo fue tomado del periódico La Jornada.

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El costo de los favores

Luis Linares zapata

Contra todos los deseos de interesados críticos que le aconsejaban a Felipe Calderón olvidar los favores electorales recibidos, éste tuvo que retribuirlos con largueza inigualable. No pudo sustraerse al reclamo de posiciones que le hacían sus codiciosos y convenencieros aliados. En particular aquellos desmesurados en sus ambiciones que, por sus consecuencias hasta generacionales, le hizo la terrible maestra de los votos trashumantes. Fue necesario, imperioso, ineludible, abrir la caja de los haberes públicos para cumplir, con puntualidad mafiosa, los compromisos adquiridos. Había que darles, también, la formalidad precisa asegurando suficientes superbotones del mando burocrático. Sólo así dejaría satisfecha a su aliada, la lidereza del Sindicato de Trabajadores de la Educación (SNTE), ese reducto del añejo corporativismo de la peor calaña.

Las decenas de miles de profesores que se enseñorearon de otras tantas urnas por violar exigieron, a su debido tiempo, puntualidad en el reconocimiento a su labor: hacer un presidente de la medianía a su alcance. No había para dónde hacerse en Los Pinos. Aquellos que le sugirieron a Calderón separarse de Elba Esther bordaron la nada, ese inasible espacio de las consejas imbéciles. Si el panista no respondiera con cargos repletos de recursos a sus apoyadores electorales ¿con quiénes gobernaría después? Esta es la pregunta incontestable y que desdeñan hacerse. No, Calderón ha demostrado ser sujeto confiable a la palabra y el beneficio acordado. Sólo que el pago a la maestra ha sido desmedido, arguyen algunos críticos blandos, estupefactos ante el abismo que se niegan a explorar a cabalidad. No se atreven a concluir el razonamiento iniciado al cuestionar el pago en especie que se hizo. Deciden, mejor, detenerse a examinar la capacidad de inducción de la lidereza y nunca insinuar siquiera que pudo, ella y sus mentores entrenados para tal oficio, trampear de manera directa y brutal las urnas del 2 de julio.

Los actuales críticos de la derecha, puristas al extremo, sólo hacen las cuentas superficiales, aquellas que no descarapelan la legitimidad de Calderón o las que pondrían en entredicho la legalidad de los comicios. Antes la humillación de la inteligencia ajena, al fin y al cabo que siempre se podrá acusar de irredentos a los difusores del fraude inexistente. Se asombran, eso sí, de la capacidad del voto diferenciado de los maestros, pero aducen de inmediato su solidaridad gremial o la capacidad inductiva de la maestra.

Otros, con menos cinismo, alegan que eso no fue una operación gratuita, gentil, verificable por la evidencia del voto magisterial solidario con el gremio y obsequioso con los intereses de sus dirigentes, sino una labor conseguida a trasmano. Es decir, debida a la influencia de algunos gobernadores norteños del PRI que le aportaron, por propia conveniencia y de manera graciosa, su concurso al candidato de la continuidad. Desechan, además, las revelaciones, bien documentadas, que ligan a ciertos consejeros del IFE (e IE de los estados) con el conocimiento preciso que tuvieron los operadores de Gordillo para engrosar o trasmutar aquellas casillas que no tendrían vigilancia opositora. O, más aún, las facilidades que, en diversas formas y con distintos medios (algunos ciertamente irrenunciables) esos mismos gobernadores (Sonora, Baja California, Tamaulipas, Puebla, entre otros) interpusieron para facilitar la operación de sustitución de votos durante la tarde del 2 de julio. Indicios, huellas inequívocas del fraude abundan. Y sólo dándoles esa puntual respuesta puede hallarse la cruda explicación ante tan descomunal serie de favores extendidos para calmar los arrestos de la maestra que avasallan la soberbia.

La dirección del ISSSTE no es poca cosa, aunque ya desde el mandato pasado se le hubiere otorgado a los pupilos de Gordillo. Esa institución es una mina de oro para los que la regentean. Tienen delante de sí la oportunidad de agrandar sus beneficios con la reforma a las pensiones. Cualquier banco o aseguradora les podrá rellenar los bolsillos de sus más rasposas ambiciones. Miles de créditos personales serán canalizados a los profesores que accedan a una módica cuota para los otorgantes, todos ellos casualmente miembros del SNTE. Otros tantos créditos para vivienda serán usados con similares propósitos de cooptación y negocios colaterales.

Similar destino le espera a la Lotería Nacional, negocio que seguirá la ruta de un bastión inexpugnable ya heredado por línea directa. Pero la donación de la subsecretaría de enseñanza básica de la SEP no tiene parangón ni nombre. Ahí radica, si se le emplea de manera debida, toda la fortaleza del sindicato y su continuidad futura. La secretaria Vázquez Mota podrá dedicarse a lo que sabe hacer: atolondrar a sus oyentes con los rollos interminables y adormecedores que recita a la menor provocación. Y la niñez de México seguirá sumida en la mediocridad de una enseñanza sujeta a las connivencias de un magisterio mediatizado e incapaz de renovarse, de cumplir a cabalidad con su misión. Pero el favor de haber logrado la permanencia del grupo gobernante bien vale tal sacrificio. Y, aunque las encuestas de opinión sigan apuntalando la mejoría de imagen de Calderón, la realidad seguirá ahí.

Este es otro artículo tomado también de La Jornada.


¿Vamos a Wal-Mart?

José Steinsleger


El comercio es portador de libertad y democracia. Excepto cuando empresas como Wal-Mart lo degradan a explotación y pillaje...

­¡Ya vas...! ¡Niega las rebajas de Sam's Club, que te han visto en Vips, que usas calzoncillos de Suburbia y que al terminar tu panfleto irás a Superama en busca de café! Niega que Sam Walton, inventor del supermercado, fue un ganador...

­Sí... ganador del premio Mercader de la Vergüenza 2003, otorgado por la Organización Nacional de Mujeres de Estados Unidos.

­¿Qué sabes de economía? ¿Recuerdas a Hernando de Soto?

­¿El conquistador que buscaba oro en el Mississippi y murió de frío en Arkansas?

­¡No, güey! El peruano que escribió El otro sendero y asesoró a Vicente Fox cuando era gobernador de Guanajuato.

­No entiendo. ¿Qué liga a Walton con Fox y ambos De Soto?

­Te explico: el conquistador fue un utópico al servicio de un Dios feudal. En cambio, el Dios prebisteriano que en Rogers (Arkansas) iluminó a Sam Walton le hizo ver que si compraba por cantidad para obtener descuentos, el oro brotaría de sus tiendas llenas de artículos variados y a precios accesibles, dando "respuesta sensible a las necesidades del pueblo".

­Propaganda. La ley dice que eso se llama dumping. En Iowa, un estudio del profesor de economía Ken Stone determinó que en el decenio 1983-93 la llegada de Wal-Mart condujo a la desaparición de más de 7 mil comercios; el mes pasado, en Pennsilvania, un juez dio respuesta favorable a la demanda colectiva de 187 mil empleados y condenó a Wal-Mart a pagar 78 millones de dólares por violación de leyes laborales; en Connecticut un fiscal investiga a Wal-Mart por explotación de trabajo infantil y Noruega excluyó a la firma de su fondo de inversiones por abusos laborales. ¿En qué asesoró el peruano De Soto a los empresarios mexicanos?

­En mucho. En El misterio del capital, De Soto nos explicó la filosofía del éxito y las causas de la pobreza y la riqueza. Con sabiduría, interrogó: ¿Por qué algunos países son ricos y otros pobres? Fíjate que para entonces (1997), los hijos de Sam Walton (1918-92) ya tenían el control de Cifra SA (Bodega Aurrerá, Superama, Suburbia), aquel conglomerado premoderno fundado por Jerónimo Arango y sus hermanos. En 2002, con Fox presidente, se constituyó Wal-Mart de México. Un año después era el mayor empleador del país y su centro de distribución se había convertido en el más eficiente de la compañía en todo el mundo en relación costo y resultado.

­¿Cuál misterio? Compras al por mayor, llevas a la bancarrota a la competencia, evades al fisco, pagas salarios miserables, te aprovechas de la desesperación de los pobres con mano de obra semiesclava, prohíbes la sindicalización, le das a proveedores y distribuidores reducidos márgenes de ganancia, inventas fundaciones de caridad y consigues la complicidad ideal: el autismo consumista de las clases medias y los "analistas" de "excelencia académica" para quienes el problema no es la distribución, sino la reducción de pobreza.

­Te respondería "es la economía, estúpido", pero hay más. Hombres como Sam Walton se sacrificaron por el progreso y fue una de las grandes personalidades del siglo XX. En los duros años de la crisis de 1930 trabajó de lechero y repartidor de periódicos para colaborar con el presupuesto familiar. En sus años de universidad, mientras estudiaba economía, Sam trabajó de camarero a cambio de comida. Los cerillos deberían seguir su ejemplo.

­¿Quieres decir que Walton fue una metáfora de Norteamérica? Tengo aquí una encuesta que asegura que 54.7 por ciento de los estadunidenses ya no está tan seguro de que lo bueno para Wal-Mart es bueno para Estados Unidos. También crece el número de personas que tiene una opinión cada vez menos favorable de Wal-Mart. En el estado de Vermont no ha logrado abrir ni un solo establecimiento. Algunos asocian a Wal-Mart con Darte Wader pues donde instala sus naves gigantescas y sus parkings para centenares de coches arrasa con la vida comunitaria de las pequeñas localidades.

­Resabios del comunismo.... ¡dumping! ¡leyes federales! ¡demandas! ¡salarios! ¡prestaciones! ¡vacaciones! ¡aguinaldos! ¡sindicatos! ¿Y la "globalización"? ¿Y los empleos? ¿Wal-Mart es el principal generador de empleos en México! ¡800 tiendas en todo el país! ¡130 mil empleados!...

­... con salarios de hambre por debajo de lo que dicta la ley, más 35 mil niños y "viene-viene" que viven de propinas debiendo además comprar sus uniformes y el jabón y la escoba para barrer y lavar los pisos. La nueva edición del diccionario Merriam Webster incluye un nuevo término: McJob, "macempleo". Trabajo basura que requiere pocas aptitudes y proporciona escasas oportunidades de progreso. El periodista Hermann Bellinghausen asegura que la empresa funciona como un cuartel que tiene un Manual antisindicalista para que los gerentes puedan detectar "las primeras señales de alerta", que aparecen cuando los empleados muestran curiosidad en las ganancias o "abusan de las visitas al sanitario".

­¿Dijiste Bellinghausen?... ¿el asesor del sup?